Nadie, te ha enseñado a aceptarte tal cómo eres.
Todo el mundo te ha dicho que seas diferente, empezando por tus padres que sin saberlo, te enseñaron a no aceptarte, luego los profesores y la sociedad en general.
Te dijeron que deberías ser alguien, que deberías conseguir un objetivo en la vida, una profesión, poder, posesión, un título y para alcanzarlo deberías luchar arduamente para ser un vencedor o de lo contrario serás un perdedor, un ignorante, un fracasado, un don nadie que nunca podrá lograr nada.
Para ser un ganador y alguien en la vida, te convertiste en un ser ansioso, violento, frustrado, lleno de miedo. Desconectándote así, de tu propia identidad natural que es la raíz de tu existencia.
Te dijeron que desde que naciste eras un pecador que no tienes salvación, y que solo Dios te podrá salvar. De manera que te aferraste a esa idea, creyendo que era tu único camino. Sé sincero contigo mismo. ¿Estás salvado? ¿Eres libre? ¿Estás realmente feliz? No, como una idea, sino como una realidad orgánica.
Alguien que también vivía con esa culpabilidad, te enseño el mismo camino que ellos siguieron, y tu ciegamente, lo aceptaste sin cuestionarlo. No tenías alternativa, eras pequeño e inocente, no tenías voz ni voto. Deberías aceptar todo lo que los adultos decían que era bueno para ti. ¿No es cierto?
Te colocaron una máscara de culpabilidad, negándote toda posibilidad de ser tu mismo, y lo único que te salvaría, era creer en una idea y tú lo creíste. Aprovecharon, de tu inocencia e ignorancia para inculcarte con ideas astutas y palabras bonitas, basado en el miedo. La vida no se vive de ideas, sino de realidades y tú eres una realidad orgánica viviente.
Dedicaste toda tu vida entera en tratar de conseguir la salvación y la liberación de esa culpabilidad. ¿Eres acaso libre de ser tu mismo? ¿Sabes quien eres? Te faltaron el respeto, te engañaron y te convencieron. Desgraciadamente sigues viviendo así encerrado en ideas.
Nunca te enseñaron a confiar en ti mismo, en confiar en la vida, siempre trataron de moldear un ser superficial en ti, alejándote de tu propia realidad existencial.
Te convirtieron en un títere de la sociedad a quien lo puedan manipular fácilmente. No cuestionas nada de lo que te dicen, no sabes analizar, no sabes investigar. Te dicen que pensar pero no cómo pensar. Tú solo sabes aceptar, porque tiene miedo de tus propias decisiones. No confías en ti. Es una lastima!
La sociedad, te creo ideales, expectativas y objetivos para que los alcances, convirtiendo tu ser, en un robot sofisticado y eficiente. Sin la capacidad de decidir por ti mismo y reconocer quien eres, para vivir tu experiencia humana tal cómo es.
Tú podrías preguntarte. ¿Qué hago ahora?
Debes darte cuenta que tú eres la criatura orgánica más inteligente y completa del planeta. Nada en ti está roto, nada que arreglar, nada que añadir ni cambiar. En la existencia todo está en orden y en paz. Confía en ella.
Eres un organismo viviente y no una idea o imagen manipulable.
Cuando tú te aceptas a ti mismo, podrás aceptar a los demás tal cómo son y en esa aceptación dejaras de ser esclavo de una idea, para convertirte en un ser libre para decidir que hacer con tu existencia.
La vida es el milagro más grande que jamás haya existido. Acéptate cómo eres y descubrirás ese milagro.